La palabra “museo” tiene su origen en el griego para significar la casa de las musas. Aunque hoy el museo es ese lugar especial que alberga y exhibe de forma profesional objetos preciosos, quizás la inspiración de las musas está presente en ellos más de lo que imaginamos. Si bien se habla de nueve musas, parece que en la Antigua Grecia eran tres inicialmente: Meletea (‘meditación’), Mnemea (‘memoria’) y Aedea o Aoide (‘canto’, ‘voz’). De manera que a la ‘memoria’, cuya dedicación siempre ha sido propia de los museos como custodios de objetos que representan por su valor la identidad de un pueblo, se une también más modernamente la reflexión y la ‘meditación’ a partir de la didáctica sobre los objetos. Pero a los museos les falta todavía una mayor influencia de la musa Aedea (también luego Eutherpe) para introducir la ‘música’.
Es pues el momento de reivindicar la presencia de la música en los museos, obviamente por muchas más razones –como se verá– que albergar en ellos la musa que aún falta.
Nos sumamos, un año más, a este festival cultural organizado por el Instituto de la Mujer y para la Igualdad de Oportunidades para celebrar el 8 de marzo, Día internacional de las Mujeres, con el propósito de propiciar y generar un espacio de encuentro y de reconocimiento del desarrollo y protagonismo artístico de las mujeres como creadoras y generadoras de ideas. Desde su nacimiento, este festival se ha caracterizado por una gran diversidad de propuestas que cada año ha versado sobre un ideario específico, siempre en clave femenina y en defensa de la igualdad real como denominador común.
Salto de línea Participamos en una nueva edición de este programa de danza que incluye obras coreográficas en diferentes museos estatales. Y nosotros y nuestro vestíbulo, encantados de saber que la música volverá a sonar por Montalbán nº12.