El final de la década de los años cincuenta viene marcado por una migración interna por la que la población rural española se vuelve urbana, huyendo de las miserias y dureza del campo.
En los tebeos se advierten síntomas de modernidad, según los modelos que triunfan en el resto de la Europa del milagro económico. Lo policiaco y la ciencia ficción ya compiten con las series históricas de capa y espada o del Far West, que todavía tienen presencia en los quioscos.
Son los años en que triunfan títulos como Milton el Corsario, Aventuras de Boro Kay, Policía del Espacio, Intrigas y Estocadas, El Pequeño Trampero, El Pequeño Héroe, Don Zeta, Davi Roy, Jim Huracán, Rin Tin Tin, Dick Relámpago, El Cosaco Verde y Kosman.