Un continente inesperado y un nuevo océano. América aparece en la proa de los navegantes españoles como un desconcertante obstáculo en su camino hacia Asia. El valioso hallazgo revela un nuevo mundo y la necesidad de un proyecto propio, pero no altera el original empeño de alcanzar las islas de las especias.
Desde las bases del Caribe, hombres y barcos prosiguen el camino al oeste en busca de las Indias. En 1513, un extremeño, Vasco Núñez de Balboa, se adentra por el Istmo de Panamá. El rumor de otro mar despierta sus anhelos: Al otro lado le espera el último gran océano