El olivar ha condicionado no solo el paisaje, sino nuestra cultura más allá de su valor económico. La explotación de este patrimonio cultural supone una base para el desarrollo de estrategias locales, encuadradas en un marco de crecimiento sostenible y ordenado que refuerza la conciencia de identidad de la sociedad que vive en un determinado territorio.
Este proyecto ha sido realizado gracias a las ayudas prestadas a empresas privadas para proyectos de puesta en valor, promoción, difusión y protección de bienes declarados patrimonio cultural, correspondientes al año 2012 (establecidas en la Resolución de 24 de mayo de 2012, de la Dirección General de Bellas Artes y Bienes Culturales en materia de protección del Patrimonio Histórico, Ministerio de Educación cultura y Deporte (B.O.E. Nº 145 de 18 de junio de 2012), la mencionada Dirección General de Bellas Artes y Bienes Culturales ha financiado el presente proyecto sobre El Paisaje de los Olivos.
En España el olivar constituye el segundo cultivo en extensión, estando presente en 13 de las 17 Comunidades Autónomas españolas, así como en 34 de sus 50 provincias. Sin duda, el cultivo y la gestión de los Paisajes de los Olivos es la principal fuente de empleo y actividad económica de muchas de nuestras regiones, habiendo llegado a modelar nuestra cultura y nuestro paisaje de una manera singular a lo largo de los siglos y milenios.
En la actualidad, existen en España un total de 309 millones de olivos que se extienden sobre más de 2,4 millones hectáreas, con una producción de aceite de 1.613.400 toneladas a cierre de campaña 2011-2012, que dan empleo directo a unos 400.000 olivareros. Igualmente, nuestro país cuenta con 29 denominaciones de Origen Protegidas, siendo la producción de aceite de oliva virgen extra acogida a estas DOP’s de 124.660 toneladas.
El presente estudio establece la búsqueda de una estrategia que asegure la conservación, según unos criterios de sostenibilidad económica, social y ambiental, de determinados paisajes de olivos existentes en nuestro país.
Para ello se vuelve prioritario:
En el estudio del olivar, se plantea el objetivo de conseguir una valoración patrimonial, entendiendo por patrimonio el patrimonio económico, cultural, social, medioambiental, espiritual, etc. Esta multiplicidad de “patrimonios” hacen necesario un sistema basado en unos parámetros, criterios o características transversales que incluyan elementos culturales, naturales, etc. y que combine varios métodos, en los que la evaluación debe tener en cuenta tanto los valores intrínsecos de la unidad como aquellos extrínsecos, derivados de su inserción en un entorno más amplio. Existen otros aspectos fundamentales a determinar que influyen de forma decisiva en las futuras acciones de gestión, como son la fragilidad, la conectividad o la funcionalidad. A todos ellos se unen además otros derivados de una de las principales características del paisaje: su dinamismo y su permanente evolución.
Documentación completa de la actuación